BOLIVIA:-La misión de observación electoral de la Organización
de Estados Americanos (OEA) en Bolivia detectó algunas irregularidades
en el desarrollo del referendo boliviano sobre la reelección del
presidente Evo Morales, pero descartó que puedan considerarse pruebas de
fraude electoral.
El jefe de la delegación y expresidente de la República Dominicana,
Leonel Fernández, consideró durante la presentación del informe
preliminar de la misión que para que las irregularidades se califiquen
como fraude, ello "requiere una intención maligna, un propósito malsano
para producir la alteración de los resultados".
"Podemos ver irregularidades, podemos ver faltas, podemos ver fallas,
pero no estamos hablando de fraude deliberado que tenga como objetivo
adulterar los resultados", aseveró.
La misión de la OEA recibió algunas denuncias de irregularidades,
relacionadas sobre todo con la falta de actas en los materiales
proporcionados en algunas mesas del departamento de Santa Cruz, que se
resolvieron retrasando el cierre de urnas y, en el caso de dos colegios,
aplazando la votación al 6 de marzo.
Los estudios de las empresas encuestadoras Equipos Mori e Ipsos
difundidos por medios locales cuatro horas después del cierre de los
colegios dieron al no a la reforma constitucional un porcentaje del 51 %
al 52,3 % y al sí entre un 47,7 y un 49 %.
A falta del escrutinio oficial, que podría tardar días, el Gobierno considera que el resultado es un "empate técnico".
Fernández se sumó a esa recomendación de "tener paciencia y esperar
los resultados oficiales del Tribunal Supremo Electoral", que definió
como "la única autoridad competente para presentar los datos oficiales".
Representantes de la misión, que contó con 63 observadores y examinó
450 recintos de votación, permanecerá en el país hasta que se publique
el resultado oficial.
Fernández eludió posicionarse sobre la posibilidad de que los
resultados de los sondeos puedan dar un vuelvo en favor del sí en el
escrutinio oficial y aseguró que su misión confía en que dicho recuento
sea "la expresión de la voluntad del pueblo boliviano".
El informe de la misión destacó mejoras técnicas en todo el proceso
electoral, pero también lamentó la lentitud en la presentación de
resultados, la falta de debate político constructivo, las carencias del
padrón y las condiciones de acceso en la campaña.
"La misión constató lentitud en la publicación de resultados", dijo
Fernández, por lo que sugiere "realizar los cambios legislativos y
aplicar los programas necesarios para que la autoridad pueda dar a
conocer los resultados preliminares de la elección con alto grado de
exactitud y evitar cuestionamientos".
La OEA ya ha realizado esa recomendación en anteriores procesos electorales en Bolivia.
El organismo también recomendó al TSE una auditoría del padrón, que
aunque ha mejorado, aún suscita quejas reiteradas respecto a su
actualización.
Según la OEA, los partidarios de las dos opciones pudieron expresarse
libremente en la campaña, pero se detectaron "asimetrías en el acceso a
los medios de comunicación".
Por ello, el informe recomendó que se trabaje en una ley de
organizaciones políticas para dar financiación pública directa a las
campañas.
"Consideramos que hay una tendencia generalizada en la región, y tal
vez a nivel mundial, donde el proceso electoral ha ido derivando hacia
la descalificación moral del adversario en lugar de una mayor
concentración en la discusión de los temas sustantivos de interés
público", lamentó.
Además, destacó la participación de delegados por ambas opciones en
las mesas electorales, pero "notó con preocupación" la ausencia de
observadores nacionales.