Santo Domingo.- El ingeniero Miguel Vargas, afirmó este lunes que desde la oposición o al frente del Estado, el Partido Revolucionario Dominicano será defensor y garante de la nueva Constitución, ya que sólo la vigilancia para que el gobierno se ciña a sus mandatos hará de
En una alocución al país por una red de radio y televisión, el presidente y líder del PRD resaltó además que la aprobación de
Enfatizó en que el PRD aspiraba a una constitución más avanzada, que fuera elaborada en una asamblea constituyente y no por una revisora, como finalmente impuso el PLD con su mayoría congresual.
Vargas Maldonado, expuso que siendo el PRD el más antiguo y activo partido, no podía mantenerse al margen de la reforma constitucional, debido a lo cual impulsó un acuerdo con el presidente Fernández para incluir temas prioritarios de la agenda democrática, que en gran medida habían sido soslayados en la iniciativa constitucional del Poder Ejecutivo.
Destacó que “
Miguel Vargas, quien estuvo acompañado de los legisladores perredeístas y la comisión que intervino en los acuerdos pactados con el presidente Fernández, consideró “impostergable el inicio del proceso de discusión plural y abierto de las grandes iniciativas legislativas que permitirán concretar las conquistas constitucionales logradas en esta reforma”.
Y al respecto mencionó
Expuso entonces que “la más urgente, vital, y trascendente de las leyes pendientes de aprobación, es la más que consensuada Ley de Partidos Políticos, instrumento esencial para el fortalecimiento de nuestra democracia”.
Aludiendo al pacto que firmó con el presidente Leonel Fernández el pasado 14 de mayo, y que junto a otras iniciativas acordadas permitió redactar la nueva Constitución, Vargas sintetizó que “El PRD ha cumplido todo lo que acordó, por lo que el país y nuestro partido esperan que el Presidente de
Institucionalidad.
El presidente del PRD reasaltó que los trabajos del Consejo Nacional de
EL DISCURSO.
El texto completo del discurso de Vargas Maldonado es el siguiente:
Pueblo Dominicano,
La inminente proclamación de
La nueva Constitución tendrá repercusiones importantes para la consolidación de nuestras instituciones, el fortalecimiento de nuestro Estado de Derecho, y los derechos fundamentales de todas y todos los dominicanos.
Desde el inicio del proceso de consulta popular, el PRD, coherente con sus plataformas programáticas desde su fundación en 1939, fue el partido que más insistió en que la reforma constitucional debía ser hecha a través de una Asamblea Constituyente.
Sin embargo, el Presidente Leonel Fernández, a pesar de que el Partido de
Una vez sometida por el Poder Ejecutivo la propuesta de reforma, y dado que la pasada dirección del PRD había mantenido el partido al margen, tanto del proceso de consulta popular, como de los diálogos iniciados por el Gobierno con diferentes sectores políticos y sociales, fuimos claros y firmes, en el sentido de que los legisladores del PRD, iban a participar activa e intensamente en
El más viejo partido activo y de oposición, no podía permanecer ajeno a tan trascendental acontecimiento.
Habiendo adoptado esta posición, y conscientes de nuestra baja matrícula congresual y que el PLD, no alcanzaba la mayoría de asambleistas requerida, para aprobar el proyecto de reforma constitucional, impulsamos un acuerdo político con el Presidente Leonel Fernández, para incluir temas prioritarios de la agenda democrática nacional, que habían sido, en gran medida, soslayados por la iniciativa constitucional del Poder Ejecutivo.
Este acuerdo, en la mejor tradición de la democracia pactada, como se manifiesta en el Pacto de
Es importante resaltar la gran labor realizada por la comisión de nuestro partido designada para la reforma constitucional, así como el magnifico trabajo de nuestros asambleístas.
Los acuerdos alcanzados, aunque no pudieron incluir la constituyente a pesar de nuestra insistencia, han sido vitales para que los textos constitucionales aprobados, permitan plasmar una serie de conquistas para nuestra democracia, nuestro Estado de Derecho y nuestra ciudadanía.
Entre los puntos más importantes de los acuerdos arribados encontramos los siguientes:
• El mantenimiento del sistema de adquisición de la nacionalidad dominicana, consistente en una combinación del Jus soli y del Jus sanguinis, pero endureciendo las condiciones para adquirir la nacionalidad por nacer en territorio dominicano, de modo que, como lo han hecho otras naciones, se evite que la flexibilidad en el régimen de la nacionalidad, fomente la inmigración ilegal y la desnacionalización.
• También, la congelación de la matrícula de
• La elección de legisladores del exterior para reconocer la realidad de una patria donde una parte considerable de sus ciudadanos pertenecen a una comunidad migrante que aporta con sus recursos, su trabajo, su intelecto y su creatividad, a la economía y a la sociedad dominicana.
• La elección por representación de diputados nacionales por acumulación de votos, lo que eleva las oportunidades de representación de los partidos minoritarios.
• La modernización e institucionalización de las Fuerzas Armadas y de
• La unificación de las elecciones congresionales y municipales, para reducir la excesiva politización del país y el dispendio de recursos, tal como lo habían requerido amplios segmentos de la vida nacional.
• La democratización de la composición del Consejo Nacional de
• La creación de un Tribunal Constitucional que, en el espíritu del Tribunal de Garantías Constitucionales propuesto por el PRD desde su fundación, sirva como garante de
Nuestro mayor aporte al fortalecimiento institucional del país, en el marco de este acuerdo, lo constituye la prohibición de la reelección presidencial consecutiva, reconociendo nuestras debilidades institucionales.
Con esta conquista, nuestro partido rectificó un error histórico, correspondiéndonos el honor de rescatar la fórmula José Francisco Peña Gómez, consagrada en la reforma constitucional de 1994.
Esta prohibición de la reelección presidencial consecutiva, que tiene aplicación inmediata, fomenta la alternabilidad democrática y propicia el desarrollo de nuevos liderazgos.
La no reelección presidencial consecutiva, elimina de raíz el continuismo personalista, caudillista y presidencialista.
La no reelección presidencial consecutiva, evita el uso abusivo de los recursos del Estado, a favor de un Presidente Candidato, que distorsiona el presupuesto nacional, y afecta el desarrollo del país, tal y como ocurrió en las elecciones presidenciales del 2008.
Pueblo dominicano, este es uno de nuestros principales aportes a la nueva Constitución.
Hay que estar conscientes, en este momento histórico, que si bien la nueva Constitución no es todo lo avanzada y progresista como aspirábamos todos, es el resultado de un esfuerzo serio, constante y concertado de todos los actores y sectores sociales comprometidos con el fortalecimiento de nuestra democracia y la consecución del desarrollo integral del pueblo dominicano.
Es impostergable el inicio del proceso de discusión plural y abierto de las grandes iniciativas legislativas, que permitirán concretar las conquistas constitucionales logradas en esta reforma.
Cabe mencionar aquí,
La ley que reglamentará los mecanismos de participación popular como el referendo y la iniciativa legislativa popular.
Y
La más urgente, vital, y trascendente de las leyes pendientes de aprobación, lo constituye la más que consensuada Ley de Partidos Políticos, instrumento esencial para el fortalecimiento de nuestra democracia.
En este punto, debo resaltar ante el país, que la aprobación de esta Ley es un compromiso entre el Presidente Leonel Fernández y quien les habla, compromiso que me ha sido reiterado, garantizando su aprobación y promulgación en la presente legislatura extraordinaria.
El PRD ha cumplido todo lo que acordó.
El país y nuestro partido, esperan que el Presidente de
Es preciso indicar, además, que los trabajos del Consejo Nacional de
Hay que enfatizar que la designación de nuevos miembros en
En el caso del Tribunal Constitucional, éste tiene que ser un espejo de la realidad política, social y económica nacional. En ninguno de los dos casos, las decisiones del Consejo deben ser precipitadas, ni impuestas al calor de mayorías momentáneas o coyunturales. Se trata de decisiones políticas fundamentales, que no pueden ser adoptadas al margen de la oposición y de la ciudadanía.
Estoy convencido, como ciudadano y como Presidente del PRD, de la necesidad de un esfuerzo concertado de toda la ciudadanía, que exija el respeto permanente de
Los derechos constitucionales no se regalan, sino que se conquistan.
Por eso, el PRD mantendrá su firmeza como vigilante de la conducta gubernamental, para que ésta se ciña a los mandatos constitucionales. Seguiremos siendo un verdadero defensor y garante de
¡Qué viva
¡Qué Dios bendiga e ilumine nuestro pueblo!