Por Reynaldo Hernández Rosa
SAN FCO DE MACORIS.- La repulsa
colectiva que se evidencia
en todos los sectores de la
vida nacional ante el
pobre desempeño de
los inquilinos del
cabaret congresual, sin
duda, invalida políticamente cualquier
pronunciamiento de todo
este cotarro de
taras indignas, empero, exiguas
excepciones salvan la
raquítica percepción que de
ellos, senadores y diputados tiene
en el común de los
dominicanos.
Son los
portales digitales, en las
diferentes provincias, los que
reseñan de las ejecutorias
de estos, los
congresistas, dado que
desde hace años
los periódicos impresos
siguen en manos de
un axial de
extorsionadores,
contratistas, asociación de malhechores, todos cobijados
en un entramado
de carpantas.
Revisando los
diarios en la red,
por provincias, solo en
María Trinidad Sánchez, se encuentran reseñados
los trabajos, ejecutorias,
así como desempeño
de su senador,
Arístides Victoria Yeb, el
cual, el mas valorado
por los residentes en la zona,
en los años recientes, dado que
está presente en cada
una de las actividades
municipales, amen del área
que le solicite
la presencia o colaboración.
Victoria Yeb,
que hace vida
diario en su
municipio, contrario al
grupúsculo de senadores,
los cuales residen en
lujosos apartamentos en
zona de evasores y
lavadores en Santo
Domingo, obviando los reclamos
colectivos de los pendejos que le
llevaron a ocupar
un asiento en el
Congreso.
Un reciente
estudio resaltaba la
pobre valoración de los
residentes de cada provincia hacia
sus legisladores, reseñando
que si hoy fuesen las
elecciones, al menos, tres
senadores repetirían en la
curul, lo que evidencia que
este conglomerado de
maulas han desnaturalizado la
solemnidad y percepción que
de ese órgano
se tenia en
años anteriores.
Se espera
que congresista como
el senador por María Trinidad Sánchez, Arístides
Victoria Yeb, del cual no se
conocen ningún tipo de
contradicción en la cámara
alta, aspire a presidir
la misma, dado
la diáfana hoja
de servicio, máxime
que no es
dado al figureo
farandulero del que son adicto
los que la presiden y
sus alcahuetes.
El Congreso
necesita muchos Arístides
Victoria Yeb, urge,
se debe adecentar esa casona
ante la misma
que le ha invadido, urge
cambiar tal percepción.
