La cabo de la Policía Nacional, Gleny de los Santos, asistió ayer a la
acostumbrada misa que celebra esa institución cada domingo con una
preocupación: su niño, de dos años y medio, tiene dificultades para
respirar, porque le practicaron una colotomía.
Pero el mayor problema que enfrenta, cuenta, es que la Plaza de la Salud
no se lo quiere ingresar porque entienden que ella no puede pagar,
aunque tiene el Seguro Nacional de Salud (Senasa), por ser miembro de
la Policía Nacional.
El niño fue remitido a la Plaza de la Salud debido a que el Centro
Médico Universal, donde está interno desde ayer en la tarde, no posee
la máquina de ventilación artificial.
De los Santos dijo que no lo pudo
ingresar en el hospital Robert Reid Cabral, porque el aparato está
dañado.
Su incertidumbre es que el niño pueda fallecer porque en el centro
médico le informaron que si no le colocan el ventilador artificial el
niño se puede cansar con la asistencia manual que están brindando.
De los Santos fue a la misa, junto con una tía del niño, con el
propósito de solicitar ayuda para que le gestionen el ingreso a la Plaza
de la Salud.
El momento fue aprovechado por el sacerdote Alejandro Cabrera para pedir
a los presentes solidarse con esa familia, siendo generosos con la
ofrenda, porque la recolecta está dedicada a esa causa. El padre del
menor es un chiripero en el Mercado Nuevo. La familia reside en Los
Guaricanos.
