Pero el hecho de que destinara sus
prestaciones laborales para compra runa pistola hace pensar que el
crimen, al menos contra su ex mujer, fue premeditado.
- Lorenzo mató ayer a la joven Belkis de los Santos, a la apersona que ésta contrató para la mudanza y luego se suicidó. Al parecer, ya había planeado quitarle la vida a su exconcubina.
Según Rosmery Altagracia Valiente, quien vive al lado de la casa
donde ocurrió la tragedia, en el interior de la vivienda se encontró una
tarjeta de una tienda de armas y diferentes precios para estas.
Valiente dijo que el homicida recibió un dinero por sus prestaciones
laborales, el cuál usó para comprar la pistola que acabó también con la
vida de su expareja.
Un mes atrás, éste fue despedido de su trabajo, por lo que los
vecinos cuentan que cada mañana lo veían sentado en el frente de la casa
sin nada que hacer y sin conversar con nadie.
De los Santos, por el
contrario, durante el tiempo que estuvo viviendo allí fue muy social y
amable con sus vecinos.
María Figuereo, propietaria de un colmado ubicado frente a la
vivienda del homicida, dijo a este medio que la joven era madre de tres
niñas, y que el asesino no era el padre de ninguna de ellas.
Precisamente el amor a sus hijas, impulsaba a Belkis a trabajar duro
para darles educación.
Su tía, Elisa de los Santos, contó que la hoy
occisa siempre decía “yo soy padre y madre de mis hijas, las quiero
sacar adelante”.
Su madre, totalmente destrozada, esperaba en la habitación de su
casa, Ubicada en Guajimia Primero, donde también se fue a vivir Belkis
con sus hijas, que trajeran el cuerpo de su única hija, el cual estaba
en Patología Forense.
Aquel escenario arrancaba las lágrimas del más fuerte de los
corazones. El cuerpo llegó a las 12 y 3 minutos del mediodía, todos se
levantaron para ayudar en lo que pudieron. Su madre, por el contrario,
ya no tenía fuerzas, solo atinaba a decir “Por qué, Dios mío, por qué me
dejaste tan sola”.
Lo que pasó ese día
Belkis de los Santos nunca pensó que la decisión de recuperar sus
electrodomésticos podría dar al traste con su vida.
Llegó al barrio la
Rosa, en el sector de Herrera, alrededor de las 8:00 de la mañana
resuelta a poner el punto final a esa historia de amor que había quedado
en suspenso 6 meses atrás.
Luego de que llamó a su expareja, quien no se encontraba en la casa,
esperó horas a que este llegara para que le abriera la puerta de la
pequeña casa, para así cumplir con lo que la idea que la llevó hasta
allí: conseguir de vuelta sus ajuares.
Cuando el reloj marcaba las 12: 00 del mediodía de ayer, regresó a la
casa Eudy Lorenzo, expareja de la joven.
De acuerdo con Rosmery
Altagracia, vecina del homicida, tras una conversación de varios minutos
entre la expareja, la mujer entró a la casa a sacar el tanque, en el
cual almacenaban el agua, a lo que su Lorenzo le pidió que le dejara el
utensilio pero esta se negó. Fue entonces cuando él le disparó matándola
en el acto.
El velatorio de Felicito Sánchez
UnaS calles más adelante era velado el cuerpo del señor Felicito
Sánchez, contratado por De los Santos para que la ayudara con la
mudanza. Este perdió la vida cuando intentó huir del asesino. Recibió un
disparo certero en la parte trasera de su cuello, caminó unos metros
pidiendo ayuda y cayó, sin vida, sin fuerzas.
Su esposa, María Monegro, ya no podía hablar, sus palabras no se
escuchaban, como pudo dijo: “Un hombre trabajador, mi compañero de toda
una vida, 32 años de casados”.
En la casa donde vivía Sánchez, su cuerpo era rodeado por sus
familiares y amigos, dos sillas plásticas sostenían su ataúd. Éste se
dedicaba al concho, pero también era obrero y chofer.
Evelyn Sánchez, hija del señor asesinado, dijo que su padre era todo
para ella y que a él y su trabajo incansable le debe todo lo que ella
es.