Asimismo, dijo que la Presidencia dispuso que los contratos vigentes
concluyan el 31 de julio y además prohibió el ingreso de nuevo personal
a la nómina de empleados fijos del Gobierno y la contratación de
personal nuevo.
“Esta decisión se ha tomado porque en el gobierno dominicano hay una
mala práctica que tiene que ser corregida, y es que las instituciones
contratan personal sin pasar por el proceso normal y de depuración, no
solo en Contraloría, porque el contratado va a Contraloría, sino también
que todos los empleados públicos tienen que pasar por la Presidencia de
la República para ser aprobados”, explicó.
Agregó que “esa mala práctica hay que romperla, porque muchas
instituciones, cuando la Presidencia le rechaza un nombramiento,
entonces colocan a la persona como contratada, en violación a normas
establecidas”.
“Lo que buscamos con esta medida es establecer un mayor orden y
disciplina en el Estado y propiciar que solo aquellas instituciones que
lo necesitan puedan tener personal contratado”, indicó.
“Veremos caso por caso, junto con los ministros, y entonces a los que
califiquen para tener un contrato se les darán sus contratos, pero no
una cantidad de gente que está trabajando en el Estado, que tienen
muchos años y que se ponen como contratados porque no se les permite
desde la Presidencia que entren a la nómina”, precisó.
Dijo que “lo que está haciendo el Gobierno es corrigiendo
distorsiones que existen en la administración pública, por lo que la
disposición debe ser vista como una buena medida, ya que se trata de
problemas y malas prácticas que vienen desde el pasado”.
Aclaró que “eso no significa que todos los contratados serán sacados
del Gobierno, sino que se revisarán los casos en cada institución y las
que no se justifiquen no continuarán”.
“Los que tengan un sueldo y estén contratados tendrán que dejar uno
de los dos. Es poniendo orden y control que estamos”, afirmó.