DESDE VILLA TAPIA:-Doña Adalgisa Polanco es una mujer de fe y conoce bien el refrán de que la esperanza es lo último que se pierde.
Ella es la sufrida madre de la adolescente Emely Peguero, de cuyo brutal asesinato se cumplieron seis meses en enero.
De ahí que con su pesar y el profundo dolor que arrastra desde agosto pasado, cuando ocurrió el hecho, sigue depositando su esperanza en Dios y en la justicia de que los responsables de asesinar a su hija, pagarán por lo que hicieron.
El cuerpo destrozado de esta inocente criatura fue encontrado dentro de un saco, en una maleta abandonada en un campo del distrito municipal de Cayetano Germosén, en la provincia Espaillat.
Esto ocurrió nueve días después de haber desaparecido tras haber salido con su novio, Marlon Martínez, a lo que se suponía seria “un rutinario” chequeo médico. Tenía cinco meses de embarazo.
Luego de un amplio despliegue en los medios de comunicación se determinó que Marlon, con la asistencia de otras personas, se había convertido en verdugo de Emely al arrancarle la vida cuando supuestamente intentaban hacerle un aborto.
Por el hecho guardan prisión aparte del joven Marlon, su madre Marlín Martínez y Simón Bolívar Ureña Almanzar, este último dueño de la finca donde fue llevado el cadáver de Emely y ligado sentimentalmente a Marlín.