Santo Domingo- El aspirante a la nominación presidencial por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Danilo Medina, calificó ayer como un trago amargo el paquete fiscal que sometió el Poder Ejecutivo al Congreso y admitió que dichas medidas impositivas afectan su campaña, al gobierno y a la organización política.
El ex secretario administrativo de la Presidencia dijo que se trata de un “trago amargo", tras agregar que una alternativa que podría analizarse con el Fondo Monetario Internacional (FMI), es la emisión de bonos para no cargar con más impuestos a la población.
Sin embargo, también al respecto, el administrador del Banco de Reservas, Vicente Bengoa, dejó establecido ayer que el gobierno no aceptará cambiar el contenido del paquete fiscal por la emisión de bonos soberanos, porque eso representaría más deuda para el país, y que el FMI no quiere que el financiamiento aumente.
También, el gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu, ha dijo que no es conveniente cambiar el proyecto por la emisión de bonos.
Las declaraciones de estos funcionarios se producen a propósito de que algunos senadores y diputados del PLD han sugerido esa posibilidad.
Medina fue abordado sobre el tema del paquete fiscal sometido al Congreso Nacional por el gobierno esta misma semana, tras una reunión que sostuvo con 27 comités intermedios en La Romana, quienes anunciaron su apoyo formal a su candidatura.
Dijo que no conoce a su profundidad ese proyecto, pero que se trata de una imposición del FMI, no un asunto que surgiera del propio gobierno.
Consideró el aspirante a la nominación presidencial por el PLD que el Congreso debe promover un consenso entre las partes involucradas en relación al proyecto de reforma fiscal, en procura de buscar alternativas para que su aprobación no afecte de manera significativa a los sectores de menores ingresos económicos.
Entiende que lo fundamental radica en que cualquier salida que se busque impacte lo menos posible a los pobres.
Observó que se trata de una imposición del Fondo Monetario Internacional (FMI), cuyo origen principal atribuyó a lo que calificó como el caos económico heredado de la administración del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), que encabezó su actual candidato presidencial, Hipólito Mejía, durante el período 2000-2004.
Manifestó que aun no conoce a profundidad el proyecto fiscal remitido esta semana a discusión del Senado de la República, “pero de lo que soy consciente es que no hubo intención del Gobierno de afectar mi candidatura a la Presidencia”.
Expresó que el propósito fundamental de esta decisión radica en cumplir con el acuerdo vigente FMI y preservar la estabilidad macroeconómica.
“Todo se solucionará de la mejor manera. Mantengo la posición de que no hay ninguna fuerza terrenal en el país que impida que sea candidato ni que gane la Presidencia de la República en las elecciones del año 2012”, proclamó.
Afirmó que irá a la dirección del Estado para llevar a cabo las transformaciones que demanda la sociedad dominicana, a fin de garantizar la felicidad plena del pueblo dominicano.
“En vista de que tengo plena convicción de que ganaré las elecciones presidenciales venideras, ya dispongo de claros lineamientos estratégicos para desarrollar una gestión gubernamental que conduzca al pueblo dominicano hacia la felicidad”, agregó.
Sobre el particular, indicó que la reducción de la pobreza representa uno de sus principales desafíos porque en la medida en que se avance en esa dirección, también se estará caminando hacia la construcción de una sociedad dominicana más desarrollada y equitativa.