Boca Chica.- Cientos de personas, en su mayoría católicas se movilizaron ayer por las principales calles de esa comunidad en solidaridad con el sacerdote Fermín Fermín, quien el martes fue asaltado y despojado de una yipeta, después de denunciar que muchos policías incurrían en actos de corrupción.
El asalto contra el sacerdote ocurrió justamente cuatro días después de haber denunciado ante el jefe de la Policía Nacional , mayor general José Armando Polanco Gómez, la existencia de policías en la zona, supuestamente corruptos.
La denuncia del padre Fermín se produjo en medio de un encuentro que el jefe de la Policía Nacional sostuvo con residentes de La Caleta , auspiciado por el alcalde de ese distrito municipal, Jesús Mercedes.
Se informó que el padre Fermín Fermín, se dirigía a la iglesia de La Caleta para realizar un oficio religioso cuando desconocidos lo encañonaron y le quitaron la yipeta de su propiedad, dejándolo abandonado en la marginal de la autopista Las Américas.
Durante la marcha de solidaridad con el sacerdote, numerosos jóvenes quemaron neumáticos y bloquearon la calle Rosa Duarte con palos, piedras, y otros desperdicios.
La población demandaba la intervención de policías en las investigaciones en torno al asalto del párroco de la comunidad.
Advirtieron que podrían continuar las marchas en la comunidad e incluso extenderla hasta el polo turístico de Boca Chica.
El sacerdote Fermín es muy querido en La Caleta , Andrés y Boca Chica, por la lucha que lleva a cabo en contra de la delincuencia, la prostitución y el consumo de drogas.
Durante la marcha se dijo que el jefe policial había ofrecido garantía sobre la seguridad física del sacerdote, así como la seguridad de que los asaltantes serán detenidos y el vehículo recuperado.
En la comunidad relacionan el asalto con las denuncias contra policías que cobran peaje a los delincuentes.
