SANTO DOMINGO:-Cinco meses después de celebradas las elecciones en las que salió
triunfante el Partido de la Liberación Dominicana y su candidato
presidencial Danilo Medina Sánchez, el liderazgo del Partido
Revolucionario Dominicano sigue empantanado en sus diferencias y con una
manifiesta incapacidad para encontrar un camino que permita la
reconciliación y el reencuentro.
Ante el fracaso de la última mediación,
los seguidores de Miguel Vargas y de Hipólito Mejía se culpan del mismo
por igual.
Miguel Vargas acusó ayer a la facción que lidera Hipólito Mejía
dentro del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) de “sabotear” los
esfuerzos de la comisión que mediaba entre ellos en procura de la
unidad de la organización política.
Dijo que siempre ha creído en las buenas intenciones de “los valiosos
compañeros que formaron esa comisión”, pero afirmó que no se puede
hablar de unidad mientras el sector que se mantiene insubordinado frente
a la institucionalidad del partido convoca ilegalmente a sus
organismos.
“Entendemos que la renuncia al rol que intentaron jugar esos
compañeros, en realidad es consecuencia de la actitud divisionista de
quienes desafían la institucionalidad e intentan irrespetar la
democracia interna, y tratan de desconocer la elección de las
autoridades del partido por parte de la Convención Nacional y el
Plebiscito”, dijo Vargas en un documento de prensa.
Mejía lamenta. Mejía, de su lado, lamentó el retiro de la comisión
que integran Eligio Jáquez, Peggy Cabral, Neney Cabrera, William Jana,
Angel de la Rosa y Siquió Ng de la Rosa y reiteró los términos de la
carta en la que manifiestan estar de acuerdo con sus propuestas
respecto a la convocatoria de la Comisión Política y otros temas.
A través de su vocero Héctor Guzmán, le reiteró los términos de la
carta en la que “la parte institucional” del PRD que lidera, le
manifiesta estar de acuerdo con sus propuestas respecto a la
convocatoria de la Comisión Política.
Vargas y Mejía reaccionaron así ante el retiro de la Comisión
Mediadora de la mesa de las conversaciones debido a las posiciones
“inflexibles” de ambos.