
Un informe ofrecido anoche por la Marina de Guerra explica
que tras el operativo fue retenida la embarcación clandestina del tipo
“Go Fast” (De prisa), pero sus tres tripulantes escaparon.
En un
informe remitido a los medios de comunicación se informó además que en
la operación participaron el guardacostas Altair GC-112, las lanchas
interceptoras Enif y Regulus, el Deproser de la Fuerza Aérea y las
fuerzas de la DNCD.
Según el mismo informe, el operativo inició a
partir de una información suministrada por el Servicio de Guardacostas
de Estados Unidos, que alertó sobre la presencia de una embarcación
clandestina que navegaba en aguas territoriales al sureste de Barahona.
Fue detectada específicamente por un avión Dash-8 del Servicio de
Aduanas y Patrulla de Frontera de ese país. Los tres tripulantes que
lograron escapar son perseguidos por la Dirección Nacional de Control de
Drogas, la División de Inteligencia Naval (M2), y otras fuerzas de
tarea y de inteligencia nacional. Durante este operativo, las
autoridades utilizaron el apoyo de aviones Supertucano.
Antecedentes
En
agosto pasado un multimillonario alijo de cocaína, superior a los mil
kilogramos, fue incautado por la Dirección Nacional de Control de
Drogas, la Marina de Guerra, la Administración Antidrogas Estados
Unidos (DEA) y el Servicio de Guardacostas durante la denominada
operación ‘Yunque y Martillo’, en la que fueron apresados cuatro
ciudadanos, supuestamente de nacionalidad colombiana, que tripulaban una
lancha rápida en la que era transportada la droga.
La información
fue ofrecida entonces por el presidente de la DNCD, mayor general
Rolando Rosado Mateo, quien identificó a los detenidos como Aluchom
Castro, Arechelleo Bocaleo, Rubén Bucaria y Micton Sretellea, todos
entregados a las autoridades estadounidenses y trasladados a Puerto Rico
junto a la cocaína para que sean procesados por una Corte de los
Estados Unidos.
La droga estaba distribuida en 40 pacas, de 25 paquetes
cada una. Se trató de una operación combinada, dijo Rosado Mateo, que
inició a las 11:15 de la noche del domingo, a 280 millas náuticas de las
costas de Barahona, para lo que fue necesario emplear tres guardacostas
de la Marina, apoyados éstos por dos lanchas de esa institución y
usando aviones espías al servicio de los Guardacostas estadounidenses y
del Servicio de Protección de Aduanas (CBP) hasta ocupar la droga a una
distancia de 18 millas náuticas de Santo Domingo.
Los equipos de la DNCD
y la Marina persiguieron a la lancha con la cocaína y los colombianos
por espacio de seis horas, logrando cercar la embarcación a 18 millas de
las costas de la capital dominicana, detalla el informe.