SANTO DOMINGO:-El presidente de la Junta Central
Electoral (JCE), Roberto Rosario Márquez, consideró este lunes como un
reconocimiento a la legalidad y a legitimidad de la investidura del
dignatario electo, la visita de del expresidente de la República,
Hipólito Mejía, al presidente Danilo Medina en la mañana de ayer.
Dijo que ese hecho “ nos enseña que por encima
de las pasiones momentáneas, nacidas del fragor de la competencia
electoral, está el interés de la nación; los miembros de la Junta
Central Electoral, con este reconocimiento, obviamente, también
recibimos, de alguna manera, un reconocimiento por nuestra labor. De
seguro que en todos estos movimientos están las manos del Todopoderoso”.
Rosario Márquez hablo durante una misa de acción
de gracias por los noventa años de la fundación de la JCE oficiada en la
catedral donde destacó que en todo este trayecto han logrado posesionar
a la JCE como una institución pública, confiable, y en capacidad de
poder aportar al fortalecimiento de la democracia, ya no solo en la
República Dominicana, sino en otras naciones, exportando nuestro
software y las aplicaciones informáticas desarrolladas por nuestros
técnicos; nuestros equipos, el material humano que hace posible que la
JCE sea reconocida en el ámbito internacional, como el ente público
electoral de referencia, y un ejemplo en la administración de los
procesos de participación política directa de la ciudadanía.
Sin embargo, al ser abordado por los periodistas
tras finalizar la eucaristía, Rosario rehusó ofrecer declaraciones a la
prensa y solo se limitó a decir que lo tenía que decir lo había dicho
en su discurso previamente.
El oficio religioso fue celebrado por el obispo
auxiliar Benito Ángeles, quien durante su homilía pidió a Dios que
esté presente en cada una de las decisiones que tomen los miembros del
pleno de la institución, para que lo hagan con transparencia.
Asimismo, Ángeles también clamó a Dios para que
los miembros de la JCE procuren soluciones legales, respeten las leyes,
así como los derechos adquiridos de los ciudadanos, esto en clara
alusión a los derechos de los hijos de haitianos nacidos en el país.
“Yo pido a Dios en este noventa aniversario de
la JCE, que El esté siempre presente, en cada uno de diálogos, en cada
uno de los encuentros, en cada una de las decisiones” exclamó el
religioso.