Santiago(EFE).- La
Fiscalía de la provincia de Santiago, en el norte dominicano, aseguró
hoy que existen pruebas "suficientes" para llevar ante la Justicia al
cura polaco Wojciech Gil, acusado de abusar sexualmente de varios
menores de edad en la comunidad de Juncalito, perteneciente a esa
ciudad.
En declaraciones a periodistas, la fiscal de
Santiago,
Luisa Liranzo, dijo que hay "muchas pruebas" que incriminan al
sacerdote polaco, que era responsable de la misión parroquial y
ministerial del Distrito de Juncalito, del municipio de Jánico, en
Santiago, a 155 kilómetros al norte de la capital dominicana.
Según Liranzo, el Ministerio Público ha recabado
pruebas "suficientes" en contra de Gil, pero que siguen investigando las
denuncias y que en un tiempo prudente presentarán las conclusiones.
La Policía polaca anunció el pasado miércoles que
localizó a Gil, quien desapareció desde que su caso se difundió en la
República Dominicana en mayo pasado.
De acuerdo con la información, el sacerdote se
había refugiado con sus padres en Modlica, un pueblo del sur de Polonia,
y no fue detenido ese día porque Interpol sólo quería conocer su
paradero.
En declaraciones telefónicas a la cadena de
televisión polaca TVP Info, Gil rechazó hoy las acusaciones, y afirmó
que su única culpa es haber depositado demasiada confianza en los
jóvenes.
"No he hecho daño a los niños, y si debo disculparme es por mi ingenuidad por haber confiado demasiado en esa gente", dijo.
La fiscal de Santiago recordó hoy que el
procurador general dominicano, Francisco Domínguez Brito, solicitó el
pasado 26 de septiembre la captura internacional de Gil tras la decisión
del Tribunal de la Cámara Penal de la Corte de Apelación de Santiago
(norte), que declaró en rebeldía al cura.
La declaración de rebeldía fue sustentada en
virtud de que el sacerdote se ausentó de su domicilio y del país para
sustraerse del proceso que se sigue en su contra por supuesta violación y
agresión sexual agravada en perjuicio de varios menores de edad de la
comunidad de Juncalito.
Los padres de al menos tres de los menores
presuntamente abusados presentaron denuncia formal en contra del
religioso en la Fiscalía de Santiago, pero de acuerdo a una fuente del
Ministerio Público la cantidad de víctimas podría ser superior a las 14.
Los adolescentes supuestamente abusados están en manos de sicólogos, debido a los traumas que les ha provocado la situación.
La Unidad de Alta Tecnología de la Fiscalía ha
asegurado que encontró "cientos" de fotos de niños en ropa interior
femenina en la computadora del sacerdote polaco.
Al caso de Gil se suma el de otro sacerdote polaco
acusado de abusos en la República Dominicana, el arzobispo y ex nuncio
apostólico en la isla Jozef Wesolowski.
La Iglesia católica polaca pidió "perdón"
recientemente, pero de forma genérica, a los menores víctimas de abusos
sexuales en Polonia y la República Dominicana, y recordó que estos dos
sacerdotes bajo sospecha son inocentes hasta que no se demuestre lo
contrario.
El cardenal dominicano, Nicolás de Jesús López
Rodríguez, también pidió perdón a las presuntas víctimas de ambos y
señaló que "estamos ante una situación que a los hijos e hijas de la
Iglesia católica nos preocupa y avergüenza". EFE