Es posible que uno de los temas más debatidos durante la última
década sea precisamente el de la calidad de la educación, y aunque
todavía el país no cuenta con indicadores actualizados para mediar el
nivel de avance o retroceso, la conclusión del pésimo desempeño del
sistema educativo, sin importar el adjetivo, se establece con claridad
en el primer Informe de avance de la ejecución de la Estrategia Nacional de Desarrollo 20130 (END).
Con la gravedad que esto implica, el gobierno desconoció en la
elaboración del presupuesto de 2014 lo que establece la ley que le dio
vigencia al plan derivado de la estrategia aprobada en enero de 2010,
donde se fijó que para poder cumplir con la meta de una inversión de 5%
del PIB en el año 2015, debe aumentarse al menos un 0.3% anual. Es
conocido que el presupuesto del 2014 para educación se mantendrá igual
al de este año, con la desventaja de que, según expertos, lo realmente
invertido quedará en 2013 muy por debajo de lo consignado tras largas
jornadas de movilizaciones ciudadanas.
Si bien no se cuenta en el momento con indicadores actualizados de
calidad educativa medidos mediante pruebas estandarizadas
internacionales, el análisis de los resultados educativos contenido en
el informe de avance de resultados de la END 2030 tomó como referencia
las pruebas nacionales aplicadas en el periodo 2010-2012. “Para el año
2014 se espera contar con la divulgación de resultados de las Prueba
TERCE de la Unesco y PISA que están siendo levantadas en 2013”.
En cobertura educativa, el documento elaborado por el Ministerio de
Economía y Desarrollo observa una tendencia positiva en función de la
información disponible, afirmación que podría entenderse como
contradictoria partiendo de que en el mismo documento se alude la
carencia de indicadores actualizados. Con todo y esto, quienes
redactaron el texto afirman que “en muchos de los casos se proyecta el logro de las metas establecidas para 2015”.
Como indicador del incremento de la cobertura educativa, el informe
destaca la “creciente participación en los programas de capacitación
laboral en 2012” y para suplir la falta de información sobre el total de
la PEA (población económicamente activa) que asiste a programas de
capacitación laboral medida a través de encuesta de hogares, se procedió
a utilizar como aproximación el porcentaje de participantes de 15 años y
más capacitados por INFOTEP.
Asimismo, se resalta el crecimiento de los indicadores tasa neta de
cobertura en educación secundaria y número medio de años de escolaridad
de la población de 25 a 39 años,que muestran una tendencia positiva en
2010-2012 al pasar el primero de 51.7% a 60.4% y el segundo de 9.4 a 9.8
años de escolaridad. Tomando en cuenta estos ritmos de crecimiento en
los próximos años “es altamente probable que las metas establecidas para 2015 sean alcanzadas”.
Sin embargo, al analizar los indicadores tasa neta de cobertura de educación inicial y tasa neta de cobertura de educación básica,
el documento señala que si bien muestran una tendencia positiva, el
crecimiento inercial no sería suficiente para alcanzar las metas de
2015. Como si se buscara llenar la laguna con palabras, los técnicos afirman que la presente administración ha iniciado dos programas de alto impacto que “darían el impulso requerido para lograr las metas”.
Se refieren al programa “Quisqueya aprende contigo” que pretende
alfabetizar 851,000 personas desde su lanzamiento en enero 2013 al 30 de
julio de 2014. “Si se cumple el cronograma pautado, la meta de erradicación del analfabetismo se habrá logrado en 2015”. Según el informe a final de mayo de este año la cantidad de inscritos en este programa alcanzaba 235,927 personas.