SAN FRANCISCO DE MACORIS:-El alcalde de San Francisco de Macorís,
Félix Manuel Rodríguez Grullón, contra quien la Procuradora
Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa exigió
orden de arresto, se encuentra de viaje, en un crucero, y regresará al
país el próximo sábado.
La vocera del ayuntamiento de San Francisco de
Macorís, hablando en nombre del alcalde, a través del programa radial El
Sol de la Mañana, dijo que se había comunicado con éste y que se
encuentra al tanto de la orden de captura en su contra.
Precisó además,
que el mandatario le comunicó que regresará el sábado y, cuando se
encuentre en el país, se pondrá a disposición de la justicia.
Rodríguez Grullón viaja en compañía de su esposa,
quien sufre una rara enfermedad y habría pasado recientemente por una
hospitalización de 35 días.
Señaló que el alcalde tenía cinco años que
no tomaba vacaciones y que fue él quien denunció el desfalco en el
ayuntamiento.
Precisó que Rodríguez Grullón estaba esperando la
situación que se ha presentado y que en varias ocasiones investigó
sobre cómo andaba el curso de la investigación.
La Procuraduría General de la República informó
anoche que solicitó y obtuvo orden de arresto contra el alcalde, por
alegados actos de corrupción administrativa en detrimento del Estado
dominicano, que envuelven más de 100 millones de pesos.
El arresto fue dispuesto por la Cámara Penal de la
Corte de Apelación del Departamento Judicial de San Francisco de
Macorís.La Procuraduría estableció que la operación sea dirigida por la
procuradora especializada de Persecución de la Corrupción
Administrativa, Laura Guerrero.
La magistrada Guerrero, también solicitó orden de
arresto contra Fior Daliza Genao Hernández, gerente financiera y
tesorera del Ayuntamiento Municipal de San Francisco de Macorís; así
como contra Jerson Nerys Lizardo Pérez, ex encargado de nómina de esa
alcaldía.
Se notificó además, que Guerrero dijo que a los
funcionarios se les atribuye la violación de los artículos 123, 145,
150, 166, 167, 169, 170, 171 y 174, así como 265 y 266 del Código Penal
Dominicano.
