Los muertos son José Antonio Montilla y su hijo Daniel Montilla Guerrero, quienes estaban radicados en la ciudad de La Vega desde hace varios años.
Los extranjeros fallecieron en la escena a causa de laceraciones múltiples. Trascendió que se dedicaban a predicar la palabra de Dios.
Los cadáveres fueron depositados en la morgue del hospital Octavia Gautier de Vidal, de aquí.