Santo Domingo:-Representantes de los sectores minero y turístico saludaron ayer la propuesta del candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano, agrónomo Hipólito Mejía, sobre enarbolar la industria turística como una de las bases para el desarrollo nacional, y la estabilidad jurídica como garantía para asegurar un buen clima de inversión y de negocio.
Congratularon, además, la posición del candidato del PRD sobre establecer la austeridad como principio y final en un posible gobierno, así como enfrentar la corrupción que, de acuerdo a Mejía, es lo que más le ha costado al país.
“Cuando uno oye la posición de uno de los candidatos que tiene posibilidad de tomar la presidencia que habla de educación, de austeridad y no a la corrupción, creo que son palabras que deberían traernos entusiasmo de que no todo está perdido, pero debemos ser cautos y entender que es una tarea de todos”, indicó Jorge Esteva, gerente de comunicaciones de Barrick Gold Corporation.
El ejecutivo sostuvo que uno de los puntos más importantes tocado por el candidato fue el de reconocer la capacidad del sector empresarial como generador de cambios en su entorno.
“El hecho de que se respete y se reconozca esa habilidad, y que eso esté dentro del programa de gobierno, lógicamente, nos brinda tranquilidad de saber que no tendremos un entorno legal cambiante”, dijo.
En tanto que Frank Rainieri, presidente del Grupo Punta Cana, mostró satisfacción con la propuesta de Mejía sobre rescatar el proyecto del muelle de Puerto Plata, disminuir el precio del combustible de avión (avtur) y darle mayor participación a la producción agropecuaria en la industria turística.
“Me alegra muchísimo ver que el candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano enarbola la industria turística”, dijo.
Durante su discurso en el Almuerzo Mensual de la Cámara Americana de Comercio, el agrónomo Hipólito Mejía propuso penalizar los productos importados similares a los que se utilizan aquí, para darle mayor participación a la producción nacional. Se refirió específicamente a productos como la carne y la leche.