WASHINGTON:-El Gobierno estadounidense denunció
ayer la situación en que viven los inmigrantes haitianos y sus
descendientes en República Dominicana, al considerar que son víctimas en
muchos casos de una "discriminación" que incluso llega a dejarles en un
estado de "apatridia".
El informe anual sobre derechos humanos
del Departamento de Estado de EE.UU., relativo a 2012 y publicado ayer,
recordó que en República Dominicana, con una población de 9,7 millones
de habitantes, residen entre 900.000 y 1,2 millones de inmigrantes
indocumentados, "en su mayoría haitianos o sus descendientes".
"La
aplicación con carácter retroactivo de políticas migratorias resulta en
la apatridia de iure y de facto para personas que han vivido en el país
durante generaciones", indicó.
El informe también denunció que,
"en algunos casos", agentes de las fuerzas de seguridad actúan en el
país "con independencia del control gubernamental".
"Otros
problemas de derechos humanos (en República Dominicana) incluyen
arrestos y detenciones arbitrarias, asesinatos extrajudiciales, un papel
débil de la justicia, tráfico de personas, hacinamiento en las
prisiones y discriminación por orientación sexual", remachó el
Departamento de Estado estadounidense.
Haítí, ausencia de la ley.
Por
lo que respecta a Haití, el informe apuntó como principales amenazas a
los derechos humanos "la debilidad del Gobierno democrático" en el país,
así como "la práctica ausencia" del ejercicio de la ley, un sistema
judicial vulnerable a la influencia política y una corrupción "crónica y
severa".
"Los problemas que afectan a los derechos humanos
básicos incluyen algunos asesinatos arbitrarios por parte de
funcionarios del Gobierno, uso excesivo de la fuerza contra sospechosos o
manifestantes, discriminación social contra las mujeres y tráfico de
personas", indicó el Departamento de Estado.
El informe también
aseguró que el Gobierno haitiano ha realizado esfuerzos para "perseguir y
castigar a los funcionarios que cometen abusos", pero lamentó que
"reportes creíbles" siguen apuntando a la práctica de actividades
corruptas "con impunidad". EFE