INDONESIA:-Después de casi una semana de búsqueda y lucha con las lluvias del
monzón, los equipos de recuperación de cadáveres del vuelo 8501 de
AirAsia tuvieron el viernes su jornada más productiva, triplicando hasta
el momento el número de cuerpos sacados del mar de Java. Un oficial de
la Marina de Indonesia dijo que algunos de los muertos seguían atados a
sus asientos.
De los 30 cadáveres recuperados hasta ahora, 21 fueron encontrados el
viernes, muchos de ellos por un buque de la Armada, informaron los
funcionarios.
El Airbus A320 transportaba a 162 pasajeros y tripulantes cuando se
estrelló en el mar de Java el domingo, mientras estaba a medio camino de
su vuelo de dos horas entre Surabaya —la segunda ciudad más grande de
Indonesia— y Singapur.
Minutos antes de perder contacto, el piloto dijo al control de tráfico
aéreo que se estaba aproximando a nubes de tormenta, pero la torre le
negó el permiso para subir a una altitud mayor a causa del alto tráfico
aéreo.
Sigue siendo un misterio qué provocó que la aeronave cayera al mar.
El coronel Yayan Sofiyan, comandante del buque de guerra Bung Tomo, dijo
a la televisora MetroTV que cinco de los cuerpos rescatados por su
tripulación aún estaban fijos a sus asientos.
Por su parte, el director de los equipos de búsqueda y rescate de
Indonesia Henry Bambang Soelistyo dijo que él sabía sólo de dos víctimas
recuperadas del mar que aún estaban sujetas a sus asientos. Añadió que
un total de 30 cuerpos han sido recuperados.
Los equipos de rescate esperan que muchas de las personas que iban en el
avión sigan dentro del fuselaje, que no ha sido localizado.
Varios países que participan en la búsqueda utilizan equipos de sonar y
detectores de metales para buscar los restos de la nave —y sus "cajas
negras", los dispositivos que graban datos de vuelo y voces en cabina—
en el fondo del océano, relativamente poco profundo.
Soelistyo estimó que el fuselaje está a una profundidad de entre 25 y 30 metros (entre 80 y 100 pies).
Los restos del avión serán clave para explicar qué pudo provocar el
accidente del vuelo 8501. La grabadora de datos contiene información
crucial como la temperatura del motor, la velocidad vertical y
horizontal y cientos de mediciones más. La grabadora de voz captura las
conversaciones entre los pilotos y otros sonidos procedentes de la
cabina.
"Nos centraremos en la detección submarina", dijo Soelistyo.
Un helicóptero del buque Sampson de la Armada de Estados Unidos llevó
cinco cadáveres a Pangkalan Bun, la localidad más próxima a la zona de
búsqueda, donde fueron descargados y transportados en ambulancias.
Bambang Soelistyo añadió que barcos de Indonesia, Malasia, Singapur y
Estados Unidos estaban en la zona desde antes del amanecer del viernes
para intentar localizar restos y las importantes cajas negras del avión.
El investigador de seguridad aérea indonesio Toos Saniotoso dijo que el
mal tiempo, que ha dificultado la búsqueda en los últimos días, sigue
siendo una preocupación. Los pronósticos hasta el domingo son de lluvia,
vientos fuertes y olas de hasta cuatro metros (13 pies). Las fuertes
corrientes marinas mantienen los restos en movimiento.
Nueve aviones, muchos de ellos con equipos de detección de metales,
rastrean también una zona de 13.500 kilómetros cuadrados (8.380 millas
cuadradas) a la altura de la costa de Pangkalan Bun. Dos barcos
japoneses con tres helicópteros están de camino a ese punto, añadió
Soelistyo.
El vicemariscal del Aire Sunarbowo Sandi dijo el viernes antes de
embarcar en un Hércules C-130 que en cuanto se encuentre el fuselaje, se
enviarán buzos para recuperar a pasajeros y tripulación.
Hasta el momento, solo los restos de una de las víctimas del accidente
fueron devueltos a su familia el jueves, uno de los muchos dolorosos
reencuentros que quedan por llegar. La identidad de Hayati Lutfiah Hamid
fue confirmada por sus huellas dactilares y otros medios, dijo el
coronel Budiyono de la Unidad de Identificación de Víctimas de Desastres
de Java Oriental.
El viernes es el día sagrado de la semana para los musulmanes. Tras las
oraciones del viernes, más de 200 musulmanes celebraron una corta
plegaria por las víctimas del vuelo de AirAsia en una mezquita próxima
al hospital de la policía de Surabaya donde se guardan los cuerpos.
"Rezamos para que los pasajeros de esta tragedia de AirAsia sean
recibidos por Alá y que todos sus pecados sean perdonados por Alá", dijo
el imán.
