Así
lo explicó ayer a Efe el cónsul de la República Dominicana en España,
Frank Bencosme, en el tanatorio madrileño de San Isidro, donde se
celebró una misa funeral y hoy serán incinerados los fallecidos.
El
embajador dominicano en España, César Medina, y el cónsul, acudieron al
tanatorio para expresar su pésame a la familia López Rosario, así como
para ofrecer todo el apoyo que necesiten, jurídico y económico, para el
sepelio.
Entre los compatriotas, amigos y familiares que
acudieron al tanatorio se encontraban tanto la madre del conductor como
la de su esposa. El accidente en el que murió esta familia ocurrió en la
tarde del pasado domingo en una carretera que une Madrid con la ciudad
costera de Cartagena (sureste), debido a una colisión lateral entre el
turismo de la familia y un camión articulado.
En el siniestro,
murieron el matrimonio -un hombre, de 28 años, y una mujer, de 26-, sus
dos hijas, de 4 y 8 años, y un niño, de 11 años, familiar de la pareja.
El coche, según fuentes de la Dirección General de Tráfico española,
circulaba a velocidad inadecuada en un tramo limitado a 50 kilómetros
por hora y con malas circunstancias climatológicas. Las primeras
hipótesis apuntan a que invadió el carril contrario en una curva
pronunciada a la izquierda y chocó con el camión.
Dolor en Las Salinas
Según
informó el corresponsal en Barahona, Benny Rodríguez, el conocimiento
de la trágica noticia sobre el fallecimiento del joven padre, nativo de
esta comunidad, junto a su esposa e hijos, ocurrido en El Pedernoso,
provincia de Cuenca, en España, ha consternado a sus familiares, quienes
manifestaron que el hecho les ha causado un impacto emocional muy
fuerte.
Su abuelo, Sócrates Féliz, padre de Lorenzo López Féliz,
quien murió al accidentarse en el vehículo en que se desplazaba junto a
su esposa Eulalia Miguelina Rosario, nativa de Nagua, sus tres hijos
Lorena, de 8 años, Sarah, de 4 y José Alejandro, de 11, y la señora
María Magdalena Féliz Alcántara, tía de la víctima, dijeron estar
“destruidos ante este suceso que ha enlutado a Nagua, a Las Salinas, a
Barahona y a la misma España, que decretó luto oficial por el deceso de
esta pareja y sus hijos”.
“Mi esposa Genara Alcántara y yo criamos
a Lorenzo desde que estaba de meses, porque su mamá, Margarita Féliz
Alcántara se separó de su papá Salvador (José) López y nos lo dejó a él y
a su hermana, Yaseli López Féliz, hasta que se marcharon a vivir con mi
hija a España hace 12 ó 15 años”, contó don Sócrates López. Hace
cuatro años que el joven fallecido, su esposa e hijos estuvieron de
vacaciones en el país.
Solidaridad
María Magdalena Féliz
Alcántara, tía del joven padre fallecido, dijo, rodeada de vecinos,
amigos y familiares en la casa paterna, estar agradecida porque el caso
ha concitado la atención al más alto nivel en República Dominicana.
También
agradeció al presidente Danilo Medina, quien designó de inmediato una
comisión encabezada por el embajador dominicano en España, César Medina,
el cónsul dominicano en Madrid, Frank Bencosme, a la ministra consejera
Yuleidis Martínez y al diputado de Ultramar, Marcos Cross, para que
asistan a la familia en todo lo necesario.
FAMILIA AFIRMA QUERÍA EL ENTIERRO EN EL PAÍS
En
Nagua, según informó la corresponsal Teonilda Gómez, la familia de la
madre fallecida en el accidente, Eulalia Miguelina Rosario, dijo que por
el momento el gobierno solo ha ofrecido apoyo moral en España de una
comisión encabezada por el embajador dominicano, César Medina, y el
cónsul Frank Bencosme.
Según dijeron Sugerly Martínez y Noé
Pérez González, el padre de la víctima, Eulogio Rosario, llamó desde
España para decirles que no habían recibido ningún apoyo económico del
gobierno como afirman se había difundido antes. Rosario les habría
manifestado que estaba preocupado porque hubo que hacer préstamos a
través de abogados y aseguradoras para hacer el funeral en la
interfuneraria de la calle Comunero de Castillo 15, de Madrid.
Sugerly
Martínez y Noé Pérez González sostienen que la decisión de enterrar en
Madrid a los cinco fallecidos en el accidente no fue una decisión
voluntaria de la familia, sino “que no había dinero para traerlos a
República Dominicana”. Los cinco miembros de la familia dominicana, cuyo
padre era oriundo de la ciudad de Barahona y la madre de Nagua, serán
enterrados hoy en un cementerio de Madrid que aún está por determinar.