SANTO DOMINGO:-El Gobierno haitiano anunció este martes el retiro de su embajador en
la República Dominicana, Fritz Cineas, alegadamente por el fallo del
Tribunal Constitucional (TC), que establece a quien corresponde la
nacionalidad dominicana.
De acuerdo a una información publicada por la agencia de noticias (AP), y
que reproducen medios locales, la decisión del Ministerio de Relaciones
Exteriores de Haití ocurrió casi una semana después de la determinación
de la Corte Constitucional de la República Dominicana.
“El tribunal decidió bloquear la ciudadanía de miles de personas nacidas
de trabajadores inmigrantes haitianos desde 1929.
Ello podría afectar a
cerca de 210.000 personas nacidas en República Dominicana de
ascendencia haitiana y a aproximadamente 34.000 nacidas de padres de
otras nacionalidades”, indica la información.
En un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores del Gobierno
haitiano expresó que “está muy preocupado por esta decisión".
ONU CONDENA DICTAMEN TC
La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos
condenó hoy la sentencia del Tribunal Constitucional dominicano que
niega la nacionalidad a los hijos de extranjeros indocumentados nacidos
en el país, lo que afecta sobre todo a descendientes de haitianos.
"Esta decisión privará a decenas de miles de personas de una
nacionalidad, lo que tendrá un impacto muy negativo en el resto de sus
derechos fundamentales", alertó hoy en Ginebra la portavoz de esta
oficina, Ravina Shamdasani.
El citado tribunal dictó una sentencia el pasado 26 de septiembre según
la cual los hijos de inmigrantes indocumentados que hayan nacido en la
República Dominicana a partir de 1929 y, por tanto, estén registrados
como ciudadanos dominicanos, perderán ese estatus al considerarse que
sus padres estaban en el país "en tránsito".
Hasta 2010, en el país había regido el principio de la "nacionalidad automática" para todos los nacidos en suelo dominicano.
Pero la nueva Constitución, promulgada ese año, establecía que la
ciudadanía sólo se garantizaba en el caso de nacidos dentro del país
siempre que al menos uno de sus padres fuera ya dominicano o bien
residente legal.
Esta decisión, que no puede ser recurrida, da a la junta central
electoral el plazo de un año para elaborar una lista de personas que
cumplan estos requisitos con el fin de retirarles la nacionalidad.
"La decisión tendrá implicaciones desastrosas para los descendientes de
haitianos, que navegarán en un limbo constitucional", subrayó.
Según la oficina de la ONU, decenas de miles de personas, que abarcan
tres generaciones, podrían convertirse en apátridas, sin acceso a
servicios básicos para los que se requiere un documento nacional de
identidad.
Su portavoz recordó que va en contra de la legislación internacional que
un país niegue la nacionalidad a un individuo que haya nacido dentro de
su territorio.