Tradición multicolor
Esta es una expresión de la solidaridad del
Gobierno con las familias dominicanas, al unirse a los festejos de cada
Navidad, para conmemorar el nacimiento del Niño Jesús y la llegada de un
nuevo año.
El tema central de la decoración es todo un
conjunto, conformado por una clara alusión a la tradición de años atrás,
caracterizada, de manera esencial, por la multiplicidad de colores.
Adornos reciclados
En medio de los jardines frontales de Palacio, el
espíritu de la Navidad está representado por el pesebre, donde las
gigantescas figuras del Nacimiento dan la bienvenida a quienes se asoman
por la calle Moisés García. Y escoltando las escalinatas, dos típicos
árboles de charamicos, de 20 pies de altura, se yerguen airosos,
adornados con flores de pascua confeccionadas con botellas plásticas
recolectadas en el propio Palacio Nacional.
Glorieta y retreta, para compartir con familiares y amigos
La alegoría vernácula está centrada en un parque
pueblerino, con su glorieta, escoltando el pesebre, para recordar que
los parques solían ser, en los pueblos, los espacios ideales para el
esparcimiento, la recreación familiar y los intercambios amistosos entre
la población.
Como una representación genuina de aquellos
parques, se presenta una réplica de la emblemática glorieta de Puerto
Plata, con su elegante estilo victoriano. Un homenaje a todas las
localidades del país amantes de la tradición.
Es cierto, nadie podía suponer un parque
municipal sin retreta; y la banda de música de la Guardia Presidencial
cumplió con ese cometido de manera magistral. Su actuación fue
respaldada por el Coro de la Guardia Presidencial con un concierto de
villancicos.
Las plantas también anuncian la Navidad
Millares de bombillas multicolores han sido
colocadas entre las ramas de arbustos, árboles y palmeras, en evidencia
total de su complicidad con el propósito de dotar al Palacio Nacional de
la extraordinaria alegría navideña que se respira por doquier.
El gigantesco árbol de Navidad que se cobija bajo
la cúpula del edificio presidencial, luce todo su esplendor de manera
reiterativa, como dueño y señor de ese estratégico espacio.
Greybby Cuello, encargada del departamento de
Eventos y Ayuda Comunitaria del Palacio Nacional, fue responsable de
dirigir y supervisar todo el montaje y decoración.
“Tradicionalmente esos lugares eran centros de
recreación familiar y de intercambios amistosos entre la población para
escuchar conciertos de villancicos”, explica Cuello, al resaltar la
importancia de la réplica de la glorieta de Puerto Plata, de estilo
victoriano, como principal elemento de la decoración. Flores de desechos
y concurso ambiental
Al igual que el año pasado, flores de pascua
confeccionadas con botellas plásticas recolectadas entre los empleados
están presentes en la decoración navideña del Palacio Nacional, debido a
que la Presidencia de la República implementa entre sus colaboradores
un programa de concienciación y motivación al reciclaje y cuidado
medioambiental.
“Estoy muy contenta con la iniciativa porque, al
margen de la actividad a propósito de la Navidad, hemos promovido un
concurso para todo el personal de Palacio, que con desechos generados en
cada una de sus áreas o aun en sus casas, puedan crear árboles de
Navidad, haciendo la aplicación de las 3R –reducir, reutilizar y
reciclar-, enfatizó Cuello, quien manifestó sus altas expectativas con
los resultados de este concurso.