
Era
mi único hijo, por un celular, ocho tiros, 19 años, un muchacho sano
que nunca me hizo hablarle dos veces.
No tengo deseos de hablar”, dijo
el padre de la víctima, quien se negó a ofrecer más informaciones cuando
se encontraba en las afueras de la funeraria Blandino del referido
sector.
“Él salió para la universidad esta mañana (ayer). Era un
niño que solo salía de su casa al trabajo, no pedimos justicia. ¿Para
qué, si no resuelven nada? Él no es el primero que muere así”, expresó
María Cortorreal, tía del joven asesinado.“¿Qué vamos a hacer sin él?”,
decían con tristeza varias amigas del estudiante universitario, quienes
además lo describieron como un muchacho alegre, de la iglesia y muy
trabajador.
Rosa Cortorreal tenía diez años participando en actividades juveniles en la parroquia San Pedro Nolasco de Herrera.
La madre del joven, Niurka Cortorreal, también se negó a ofrecer información a la prensa.
Miembros
de la familia dicen que el joven será enterrado mañana en el cementerio
Cristo Redentor, posiblemente en horas de la mañana.